El 26 de abril de 1986 la ciudad de Pripyat, lugar utópico dentro de la extinta Unión Soviética, y junto con sus pobladores, vieron cómo todo se venía abajo por culpa de la explosión en la Central Nuclear de Chernobyl.
Ciento de historias aterradoras se tejen alrededor de lo que es considerado como el peor accidente de la historia de la energía nuclear.
Después de ser una ciudad pujante, a la vanguardia de la tecnología gracias a su espeluznante inquilina como lo fue la Central Nuclear, Pripyat se convirtió en una aterradora ciudad fantasma llena de radiación y en donde todavía se escuchan los gritos y lamentos de sus muertos.