El 4 de marzo de 1975, agobiado por lo que el consideraba como una gran frustración exitosa, pero corta, carrera musical, Jim Sullivan tomó sus Volkswagen y partió desde los Ángeles con rumbo a Nashville y nunca más lo volvieron a ver, ni a saber de él hasta la fecha.
Había grabado un album alusivo a su obsesión con los extraterrestres llamado U.F.O (siglas de Unidentified Flying Object, OVNI en inglés) y al parecer, fueron estos mismos quienes se lo llevaron en el desierto de Nuevo México.
La polícia encontró su auto y sus pertenencias, pero, ni un solo rastro del cantautor.